martes, 12 de junio de 2007

La importancia de un abrazo entre padre e hijo


C.R.A.Z.Y., una historia de amor entre un padre y un hijo, una fábula mística llena de fantasía acerca de la belleza, la locura y la poesía del alma humana.

Comprensión. Si todos le hiciéramos un poco de caso. El amor de una familia es muy dificil romperlo, y la sociedad sin embargo es capaz de atraparlo por las racices y secarlo.

La película es una lección de comprensión. No hay que esperar a una desgracia para resolver otra de menor importancia. Las soluciones hay que tomarlas en el momento, si a la naturaleza del protagonista se le quiere atribuir como el calificativo problema.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ains...Corazón!
Qué bello leerte...
Tanto tiempo sin saber de ti...No sin saber exactamente, si no sin saber como antes sabía yo de ti...y tú de mi.
¿Sabes?
La relación más rara que he tenido con una persona ha sido la nuestra, pero también la mejor.
Y dicen que de cada persona se aprende una cosa, pues yo de ti aprendí miles.
Aprendí a mirar con otros ojos, a escuchar la música de un piano (quizás no como tú puedes llegar a sentirla), a soñar en la cama de otra persona, a compartir cama con dos personas más...
Pasión era lo que me llevaba a besarte, temor de que todo acabara sin ni siquiera empezar...
Y así fue.
Y ahora? Cada uno fue por su camino, el mío quizás más avieso...
Pero no olvido los besos en tu cama, ni los del mercantil, ni los del ibn marwan,ni todos aquellos que me robaste o que te robé, ni las caricias, ni los momentos de "la sábana"...ya nada puede olvidarse, simplemente quedará recordar los momentos en la escalera fumando cigarros y anhelando ese viaje a la playa, más besos de despedida en la puerta de mi casa temiendo que saliera el vecino...
Ya ves, cómo decirle TE QUIERO a quien me enseñó que la vida es maravillosa y cruel a la vez??
Te adoro, rey!
-MARTA-

Jose Beltrán dijo...

Tú imaginación y frescura unido a mi sueño y paranoia. Era la unión perfectamente explosiva.
En otro lugar y tiempo, y a una velocidad diferente,¿hubiera sido de otra manera? Pues seguro que sí. Pero sabes qué, me quedo con ésta. Porque tan cruel en algunos momentos, pero tan auténticamente maravillosa en otros.
Quiero volver a saber de tí, y a confiar todo en tí, y quién sabe si ha confiarnos mutuamente.
Que nos se olviden esas noches maravillosas, ni esos cuentos marinos y sarcásticos de sirenas, ni esos sueños italianos...
Que el futuro nos depare una casita italiana con animales y un kamasutra campestre...jejeje.
Para un recuerdo tan patente que se olvida que es recuerdo.